Hacía ya tanto tiempo que no pasaba por aquí que el blog se sintió casi abandonado por completo. Entre quehaceres de Navidad, preparativos y fiestas en Año Nuevo, paseos a Aculeo, otitis aguda primero en un oído y luego en el otro, fallidos y ahora posterados viajes a Isla de Pascua e inesperadas vacaciones con papás, me he desconectado del mundo. No sé lo que ha pasado en este país, no tengo idea dónde están la mayoría de mis amigos, no sé si el mundo se cayó a pedazos o si a Obama lo mataron después de llegar a la Casa Blanca (porque sí, en medio de todo lo que me pasó me di el tiempo de mirar por la CNN-la española eso sí- como por primera vez un negro asumía como presidente de los gringos).
No he visto noticias y apenas he leído diarios, por lo que mis profesores de la escuela estarían muy decepcionados de mí, pero después de un año de ser bombardeada con la pirámide invertida y demases, necesitaba un descanso.
Su servidora les escribe desde Pucón, a mitad de camino entre el pueblo (o ciudad, nunca he sabido cuándo ascienden en la categoría) y el lago Caburga. Es la primera parada de las vacaciones con mis viejos, las que no estaban dentro de mis planes originales para este verano 2009. Mis hermanos nos prestaron su casa que queda muy cerca del río Trancura y he pasado aquí los últimos 6 días. En realidad, es un buen panorama porque la casa tiene de todo (menos tele, lo que agradezco) y mi papá, en su negada faceta trabajólica, se trajo el notebook con Internet portátil. El único problemilla vendría siendo que la señal es como las pelotas y uno tiene que tener paciencia de santo para que se le abra una página-si es que se digna a abrirse- o andar como loco por las piezas, la terraza y el jardín con el PC en alto, tratando de que las barritas de la señal suban…o en muchos casos, que aparezcan.
En realidad, es bastante buena mi situación. Lo único que me hace falta es alguien joven que me acompañe en todas las locuras de este par de seres en que se transforman mis padres cuando salimos de vacaciones, pero aparte de eso, la vida me está tratando bien.
Lo siento, de verdad traté de evitarlo, pero terminé escribiendo un testamento como siempre. Se agradecerá que dejen comentarios contando qué es de sus vidas….seguro que en alguna esquina del techo encontraré señal para leerlos!
la foto (si es que la señal decide que va a ser buena conmigo y me permitirá subir la foto) va dedicada a la persona joven que suele acompañarme en las travesías de los veranos Brinck y que ahora está viajando por Europa. Besos hermana! (en realidad, la foto no nos favorece mucho a ninguna, pero bueno xD es lo que hay)
la señal decidió que era buena idea subir la foto...ahora veamos si me sube la entrada...